miércoles, 13 de enero de 2010

¿3D o cine artesanal?

Hola amigos y feliz año a todos.


Queremos comenzar el año con un interesante debate que se empieza a formar en torno a los nuevos usos del cine. El futuro se está planteado complicado en la industria con una palpante crisis de guionistas y creadores. Por lo tanto se intenta solucionar con un avance en la parte técnica de la manufactura cinematográfica. Está claro que hablamos del guante lanzado por James Cameron con su Avatar (2009). Según el señor Cameron el cine va a cambiar hacia planteamientos tridimensionales con los que el espectador va a poder meterse dentro de la película y formar parte de ella. El reto es interesante pero plantea demasiados inconveniente e interrogantes.

Cameron ha necesitado de mucho tiempo y muchísimo dinero para poder fabricar su film y, evidentemente, esa inversión sólo está al alcance de poquísimos realizadores y productores. Bien es cierto que la tecnología actual podría abaratarse con un frecuente uso en una gran cantidad de películas, pero aún asi seguiría siendo vetada para la gran parte de los mortales que cuentan con una relación tiempo-dinero más bien escasa. También tenemos otro problema y es el del plantemiento formal y esencial de la película. Abandonarnos al despliegue pirotécnico no es suficiente para muchos espectadores que también necesitan ser atrapados por lo que les cuenta el film. En este terreno todavía el cine convencional o artesanal, alejado del chroma y demás efectos de ordenador, tiene muchísimo que decir.

Para ser sinceros James Cameron tiene razón. Probablemente el futuro pase por las tres dimensiones. Pero eso no quiere decir que el cine elaborado artesanalmente esté muerto o no pueda dar una réplica desde su humildad.

El cine en 3D no es nuevo, ya hubo anteriores intentos para hacerlo atractivo. El logro de James Cameron ha sido el hacerlo creíble y visualemente muy efectivo. Las cosas como son, es un pionero y un visionario que ha indicado el camino a seguir para atraer al personal al cine. Ese empeño y su logro son intachables e incontestables, de hecho ahí están los resultados en taquilla. Pero no es el camino a seguir para todos, sólo de unos pocos. Por supuesto que las buenas historias pueden ir ligadas al 3D, y la de Cameron no es mala, pero hace falta muchísimo más para desbancar al cine hecho desde las antípodas de Avatar.

Nuestro apoyo al cine va desde lo más humilde hasta la producción más cara de la historia. Pero necesitamos saber qué es lo que opináis vosotros. El cine tiene muchísimas vertientes y lo que gusta a unos repele a otros. Es el clásico debate.

Un saludo.

3 comentarios:

Luis S. dijo...

Un comentario de Luis
(www.elcineenquevivimos.es)
Lo único que me gustaría comentar es que, en mi humilde parecer, se habla demasiado de "Avatar". Y esto ocurre con gente que sabe mucho sobre cine, como usted (y ustedes), y con el resto del mundo. Esto es comprensible ya que estamos literalmente invadidos, publicitariamente y en cartelera, por la película del director de "Terminator".
Modestamente, opino que haríamos mejor en abrir otras puertas (y ventanas), pues hay sobreinformación sobre este tipo de cine, mientras que muchos espectadores e incluso supuestos aficionados al cine desconocen quién es Pedro Costa o Klotz o Albert Serra...
O, sin ponernos tan radicales, podríamos hablar más y escribir más sobre Haneke, Cronenberg, Leigh, Guédiguian, Almodóvar, Erice, Moretti, etc.

Un saludo cinéfilo y cordial.

Luis S
(www.elcineenquevivimos.es)

LaMímesis dijo...

Esa necesidad de dar relieve a las imágenes mediante la tecnología es una equivocación.

También es una equivocación el dar relieve a las narrativas echando mano de efectismos narrativos, uno tras otro. En los últimos 15 años los giros narrativos en los guiones y las historias basadas en secuenciamientos no hacen más que buscar esa tridimendionalidad, ese "efecto de impresión" en el público. Es todo un error limitar la atención del público a ese estímulo físico, tanto visualmente por medio del 3D, como de la narración, por medio del secuenciamiento.

Si se quiere un cine físico este ha de estar presente en la forma y el contenido. La historia y la puesta en escena puede ser física principalmente. Recordemos a Cassavetes, a los Dardenne, a Haneke, a Bergman, por ejemplo. Puedes incluso salir mareado y conmocionado de una de sus películas sin la necesidad del desarrollo de la técnica narrativa y la tecnología en efectismos estimulantes físicos y tramposos.

Lo que quiero decir que si queremos que el cine recupere espectadores y fuerza dentro de los demás medios de entretenimiento NO es desarrollando nuevas tecnologías, NO es asimilando el cine a otras formas de entretenimiento como los vídeo-juegos, NO. Si no en dando una identidad diferenciada, individual, al cine, indagando en la narrativa del placer a largo plazo y en las apuestas formales que vayan acorde con la apuesta narrativa, en devolver la dignidad al arte cinematrográfico, alejado de retribuciones a corto plazo (estímulos físicos, como sustos, sorpresas continuas marcadas por una tecnología y el uso de trampas continuas en la narrativa).

Si limitamos el cine solo al consumo inmediato y olvidamos que ante todo es arte (y arte es una cuestión a largo plazo), lo estamos matando. Los que hacen cine tienen que centrarse en la verdad que les empuja a hacer películas. Si esta verdad es el dinero no hay arte que pueda surgir de ahí. La "verdad", en el amplio espectro de la palabra, es la clave. El 3D no se asemeja a una realidad verdadera, por mucho que la gente se engañe en creer que si. De hecho, es lo opuesto.

Anónimo dijo...

Cómo se pueden decir tantas tonterías? no me lo explico.
Qué es el buen cine, entonces?
El que le gusta a Luis?
Es acaso acaso un guion de Almodovar o david lich mejor que uno de cámeron?
Me parece que se confunde el gusto personal con la calidad.
A mi las películas de violencia no me gustan, pero el guión de celda 211 es perfecto. Por eso le gusta al publico. Terminator dos es también perfecto.
Es acaso que la vamos de frikis anti.americanos por que las películas que nos gustan son las que nadie entiende y las paga el estado con sus subvenciones?!
Debe haber para todo los gustos...
Y emitir juicios sobre el cine porque no está de acuerdo con mis gustos es siempre totalitario. Sea izquierda o derecha... siempre es imponer un modo, un sexo, una religión, un gusto a los demás...
Joder tíos, es que no aprendimos nada de la estúpida guerra civil?!!